Reforma integral de piso de 90 m2 en Las Arenas, Vizcaya.  Se ha redistribuido toda la vivienda. La zona de comedor y salón ahora es contigua a la terraza. Un hall hace de antesala para descubrir el espacio principal. La cocina integrada pasa casi desapercibida. Completan el programa de actividades una habitación con baño privado, una habitación de invitados, un espacio comodín semi cerrado y un baño común.

 

La estética de esta vivienda es masculina. El suelo, en madera de roble color whisky, acompañado con el revestimiento porcelánico oscuro de los volúmenes que separan el hall de entrada, contrasta con las paredes blancas y la potente encimera de Krion blanco de la cocina. La viga y la columna en hormigón visto dividen el salón del comedor.  La pared de la televisión es el punto focal de la zona “living”, tapizada en un papel textil color beige, aporta calidez al espacio. El mobiliario es sencillo, en tonos empastados con la paleta de color del envolvente. Personalidad y elegancia caracterizan esta intervención.

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